La supervivencia de Castillo pende de un hilo

¿Querrá el profesor cajamarquino optar por el camino del sentido común y la moderación, o intentará caminar por el sendero de la confrontación, al mismo estilo del hoy investigado y varias veces vacunado “lagarto” Vizcarra? Castillo entrará débil bajo la sombra de la corrupción y un posible fraude. Castillo no debería radicalizar su discurso o estará condenado al suicidio. Hay que vigilarlo.

Jose Ignacio Beteta Bazan